El centro de Neurodiversidad Educativa para la Inclusión, el Desarrollo y el Asesoramiento a las familias y los profesionales, se establece como un gabinete psicopedagógico. El centro atiende a personas, tanto adultas como menores, con necesidades específicas, con el propósito de favorecer su máximo desarrollo y promover su participación activa en la vida cotidiana.
Con el objetivo de estimular al máximo las capacidades de estas personas se trabaja desde un enfoque integral analizando diferentes aspectos del desarrollo físico, intelectual, emocional y social en los distintos contextos en los que interactúan. Por ello, las intervenciones parten de una evaluación psicopedagógica que indique cuáles son las principales limitaciones del individuo para diseñar un plan de intervención personalizado y poniendo en valor sus fortalezas.
Por todo esto, se trata de un servicio destinado a todas las personas que vean limitada su actuación en la vida cotidiana como pueden ser estudiantes con Dificultades de Aprendizaje (dislexia, discalculia, TDAH, etc.) y alumnado con Necesidades Especiales de Apoyo Educativo (TEA, altas capacidades, desconocimiento de la lengua, trastornos del desarrollo del lenguaje, etc.). Igualmente, pueden beneficiarse de este servicio personas mayores con principio de demencia o pérdida de memoria, así como personas adultas con cualquiera de las necesidades anteriormente indicadas.
A grandes rasgos, se trata de un espacio destinado a potenciar las capacidades individuales de las personas participantes y con el objetivo de acompañar y asesorar a sus familias y a otras profesionales con las que interactúen desde un enfoque siempre centrado en el individuo.
Descripción del gabinete
El Centro NEIDA se constituye como un gabinete psicopedagógico especializado en la atención integral de personas con necesidades educativas y de apoyo específicas, así como en la orientación a las familias y los profesionales del ámbito educativo y sociosanitario.
Este proyecto surge de la necesidad de ofrecer un espacio inclusivo en el que cada persona, independientemente de sus características, encuentre acompañamiento para potenciar sus capacidades y superar las barreras que dificultan su participación plena en la vida cotidiana. En esta línea, surge como respuesta a una demanda creciente y a la escasez de recursos disponibles para dar una atención especializada de calidad.
Por ello, se determinan como valores principales del centro:
En definitiva, se trata de un gabinete comprometido con la inclusión y el desarrollo, que actúa como un recurso de referencia tanto para alumnado con dificultades de aprendizaje (dislexia, discalculia, TDAH, etc.) o necesidades especiales de apoyo educativo (TEA, altas capacidades, desconocimiento de la lengua, trastornos del desarrollo del lenguaje, entre otros), como para personas adultas y mayores que presentan limitaciones en su participación cotidiana debido a procesos neurodegenerativos o de salud.
Para llevar a cabo estos valores, la responsable del centro, Elena Subirá Español, cuenta con una sólida experiencia en la intervención y el acompañamiento a personas con neurodiversidad desde distintos ámbitos. Su trayectoria incluye la práctica en educación formal, educación no formal y en el contexto clínico, lo que le ha permitido adquirir una visión global de las necesidades y potencialidades de cada individuo.
La colaboración con diversas entidades y profesionales ha contribuido a consolidar una metodología de trabajo especializada, basada en un enfoque bio-psico-educativo que integra los aspectos biológicos, psicológicos y educativos de la persona, garantizando así intervenciones ajustadas a cada demanda y efectivas.
Este recorrido profesional se complementa con una sólida formación en educación y psicopedagogía, que incluye titulaciones específicas en intervención psicoeducativa, detección e intervención en ACNEAE, así como la acreditación para el uso clínico de la prueba ADOS-2 en el diagnóstico de TEA.
Servicios que se ofrecen
El objetivo principal es favorecer el máximo desarrollo de cada persona mediante propuestas de intervención ajustadas a sus necesidades. Con este fin, los servicios se organizan en distintos bloques:
Evaluación psicopedagógica
El objetivo de esta evaluación es identificar las necesidades específicas del individuo para el diseño de un plan de intervención ajustado a sus necesidades.
Intervención individualizada
Con la intervención individual se pretende favorecer el desarrollo académico, social y personal del individuo a través de una secuencia de sesiones estructuradas y ajustadas a su perfil.
Programas grupales
Los programas grupales contribuyen a trabajar la interacción entre iguales favoreciendo la creación de vínculos de amistad y fomentando el aprendizaje cooperativo. Este aprendizaje entre iguales favorece la generalización de los aprendizajes adquiridos a otros contextos.
Orientación familiar
Se pretende ofrecer acompañamiento y recursos prácticos que refuercen los conocimientos trabajados en el gabinete y que favorezcan la convivencia y el desarrollo generalizado del individuo.
Colaboración con otros profesionales
La colaboración con otros profesionales resulta de utilidad para ofrecer una intervención coherente entre los distintos agentes que participan con el individuo.
Metodología de trabajo
La metodología del centro se fundamenta en una evaluación continua de las necesidades y capacidades de cada persona, con un enfoque global que integra los aspectos biológicos, sociales y académicos. Mantiene un enfoque global en el que se estudia el caso concreto atendiendo no sólo a su desarrollo biológico, sino también al social y al académico. Igualmente, el objetivo final de la intervención que la persona adquiera estrategias que le permitan participar activamente en distintos contextos.
El proceso de intervención se inicia tras la detección por parte de la familia o de otros profesionales de limitaciones en el desarrollo lingüístico, social, académico y/o emocional del individuo.
A continuación, se realiza la evaluación inicial del individuo. Para ello, se utilizan instrumentos y técnicas variadas y validadas científicamente que determinen de manera objetiva las fortalezas, las limitaciones, el estilo de aprendizaje y los intereses de cada sujeto.
Además, se considera igualmente relevante la evaluación del contexto para comprender de manera global los distintos aspectos que pueden incidir en su desarrollo. Para ello, se considera relevante mantener reuniones con el entorno familiar, así como con el escolar -en el caso de estudiantes-.
Esta información sobre el contexto junto con los resultados de obtenidos en las pruebas estandarizadas permiten realizar un estudio en profundidad del caso a partir del cual se diseña el plan de intervención personalizado. Los resultados del estudio en profundidad del caso así como la propuesta de intervención son siempre comunicados a los familiares del individuo antes de comenzar la intervención.
El programa de intervención es siempre personalizado tanto en el tipo de sesiones que se realizan (individuales y/o grupales) como en la duración y la periodicidad. Además, el programa de intervención incluye evaluaciones recurrentes que permitan estudiar la evolución del individuo, así como ir ajustando la intervención a su ritmo de aprendizaje.
En la misma línea, el programa de intervención incluye sesiones periódicas de seguimiento con la familia para conocer el desarrollo del sujeto en el contexto familiar y coordinaciones con otros profesionales (docentes, logopedas, psiquiatras, etc.) para unificar los criterios de intervención.